
PERROS DE ATAQUE
12 octubre, 2020Se define como ansiedad por separación al estado de estrés que alcanza el perro cuando no tiene acceso a su propietario. Este estado no ocurre porque el animal sienta una dependencia hacia su humano, sino porque no es capaz de gestionar la situación de soledad y separación.
Así, no se trata de una obsesión, sino de un vínculo de apego y una incapacidad de construir un equilibrio estando solo. Para el perro, su propietario actúa como una figura de referencia que lo guía y le proporciona protección, dicho de otro modo, es su base segura. Cuando su base segura no está, y el can no ha aprendido a sobrellevar esta situación, es cuando aparece el estrés, el miedo, la frustración y la ansiedad, haciendo que presente una serie de síntomas y comportamientos indeseados.
No obstante, existen distintos tipos o grados de ansiedad por separación en perros, de manera que algunos sí pueden estar relacionados con una relación de hiperapego por parte del perro y, al mismo tiempo, una mala gestión de la separación.
Tipos de ansiedad en los perros

Tipo A o hiperapego primario: sucede en canes que han sido separados de su madre y hermanos prematuramente. Cuando se produce un destete temprano y, por ende, menos natural, el perro no ha experimentado un desapego progresivo, por lo que no ha aprendido a estar separado de su base segura (en ese caso su madre). Lo ideal es dejar que el destete se produzca de forma natural para que la madre enseñe a su cachorro a estar sin su protección. Por ello, la mejor edad para adoptar un cachorro es los tres meses de vida, tanto para evitar el desarrollo de este trastorno emocional como para prevenir problemas de socialización, y de conducta en general, derivados de la pronta separación.
Tipo B o hiperapego secundario: se produce después de haber pasado un tiempo prolongado con el perro, como por ejemplo tras unas vacaciones o una baja laboral. En este caso, el can inicialmente era capaz de gestionar la soledad, pero tras experimentar ese contacto repetitivo con su figura de referencia, crea una especie de dependencia que provoca ansiedad cuando su base segura se ausenta. Por otro lado, este tipo de ansiedad por separación en perros también puede suceder tras una mudanza, un abandono o el fallecimiento de su figura de referencia. Aquí, el perro ha perdido lo que para él era un estímulo importante (un hogar o una persona), siente la necesidad de contacto con su base segura y se muestra miedoso, estresado, nervioso o ansioso en soledad.
Tipo C: ocurre cuando el perro ha sufrido una experiencia traumática o negativa estando solo. En este caso la ansiedad por separación se manifiesta únicamente cuando aparece el estímulo que provoca miedo en el perro.
En general, un perro con ansiedad por separación es incapaz de encontrar un equilibrio entre entorno, estímulos sociales y figura de referencia cuando uno de estos elementos falla. Esta capacidad para equilibrar los distintos elementos que se encuentran a su alrededor, aunque uno de ellos se ausente durante un tiempo determinado, se conoce como homeostasis sensorial. Un can equilibrado es capaz de mantener este equilibrio aunque su figura de referencia (propietario) no esté en casa. Un perro con la homeoastasis sensorial alterada, por los motivos anteriores, sufre este tipo de ansiedad.

Causas de la ansiedad por separación en perros
Antes de adentrarnos en la sintomatología de este tipo de ansiedad y las posibles soluciones para tratarla, resulta importante hablar de las causas más comunes que la provocan.
Como hemos comentado en el apartado anterior, el destete prematuro es uno de los motivos más habituales del desarrollo de este trastorno. Así mismo, el cambio de hogar o el abandono también figuran entre las principales causas de ansiedad por separación en perros. Por ello, es frecuente encontrar este tipo de casos entre perros adoptados, adultos o ancianos, debido a la separación experimentada con sus anteriores propietarios.
Sin embargo, no son las únicas razones, de manera que esta alteración del equilibrio también puede ocurrir por los siguientes motivos:
- Si pasabas prácticamente todo el día con tu perro y, por el motivo que sea, has dejado de hacerlo, probablemente esta sea la causa. Pasar de estar siempre contigo a quedarse muchas horas solo en casapuede haber desencadenado el estado de ansiedad en él de tipo B, o hiperapego secundario, explicado en el apartado anterior.
- En relación con el punto anterior, ¿has realizado algún cambio en su rutina o hábitos diarios? Si es así, es posible que este sea el motivo.
Si tu can ha desarrollado este estado de repente y sin ninguna explicación aparente, puede que la causa resida en un episodio traumático que haya experimentado mientras estaba solo en casa. La relación que el can establece es muy sencilla: sin su base segura ha ocurrido algo negativo, de manera que la situación de soledad ahora es insegura y, por tanto, siente miedo y ansiedad cuando ahora está solo.
Una vez diagnosticada la ansiedad por separación es fundamental tratarla para devolver al perro la estabilidad emocional, ya que lo pasa realmente mal estando solo. Pero, ¿cómo se diagnostica?
Muy sencillo, garantizando que el perro manifiesta los síntomas únicamente en ausencia del propietario. Estos signos debe mostrarlos siempre que se encuentre solo, incluyendo las salidas cortas.
Aunque no todos, la mayoría de perros con ansiedad por separación demuestran nerviosismo y ansiedad cuando su base segura se va, a pesar de que en el hogar haya otra persona que forme parte o no del núcleo familiar.
Síntomas de la ansiedad por separación en perros
La ansiedad se distingue por una serie de comportamientos en el perro extraños o anormales que podemos vislumbrar fácilmente. Sin embargo, en ocasiones se pueden confundir con los síntomas propios de otros problemas. Por ello, para conocerlos mejor y aprender a identificarlos sin error, los separaremos en dos grupos: los síntomas que el perro muestra durante la separación y los signos asociados que presenta antes o después.
Durante la separación, el perro con este tipo de ansiedad puede mostrar síntomas productivos o síntomas deficitarios. Los productivos son los siguientes:
- Comportamiento destructivo. Cuando se queda solo en casa, puede llegar a destrozar objetos, muebles e, incluso, esparcir la basura.
- Ladridos excesivos, lloriqueos, gemidos y, según la raza del can, puede que hasta aullidos cuando está
- Orinar y/o defecar dentro de casa, especialmente cerca de la puerta de salida, aunque también puede hacerlo por todo el hogar. En perros bien adiestrados, acostumbrados a hacer sus necesidades en la calle, este comportamiento poco habitual puede ser la clave que nos indique que algo le sucede.
- Vómitos o diarreas. En los casos graves de ansiedad, es posible ver estos síntomas, a pesar de que no acostumbran a ser muy frecuentes.
En cuando a los síntomas deficitarios que un perro con ansiedad por separación puede desarrollar estando solo, son:
- Dejar de comer.
- No beber nada.
- Ignorar los juguetes, incluso los dispensadores de comida.